Deporte en tiempos de COVID-19: "Puedo entrenar y competir".

 

    De entre todas las circunstancias que hemos descrito, sin duda ésta es la más halagüeña. Es casi como antes, ¿no? Se trata de un deportista cuya vida sigue más o menos normal, con sus horarios de entrenamientos y su calendario con las competiciones marcadas en rojo. 

    Pero he escrito casi. Y es que, para estos deportistas, el cuento también ha cambiado mucho. 

    Para empezar: la mascarilla es obligatoria. Entrenar y competir con ella no es fácil, pero no hay más remedio. Para seguir: hay muchas conductas que han tenido que cambiarse. Y los deportistas tienen que adaptarse: es que no les queda otra. Tienen que acostumbrarse a llevar media cara cubierta y, aunque puedan quitarse la mascarilla, deben andar muy pendientes de que no haya nadie cerca. ¡Ni siquiera con los compañeros, esos con los que antes nos abrazábamos o compartíamos el agua! Los vestuarios se cierran. No hay fuentes con agua. No puedes moverte de tu zona. ¿Esas cosas que antes hacías y que te gustaban? Ten cuidado. Muchas de ellas ahora son peligrosas. 

    Sí, entrenar y competir es una suerte, dadas las circunstancias. Pero esto no significa que la situación sea fácil. 

    Cuando el estado de alarma terminó y pudimos recuperar poco a poco nuestro deporte, se vio que muchos deportistas se lesionaron. La carga emocional que llevaban encima era tan grande que, sencillamente, les costaba controlarse. ¡Tengo tantas ganas de entrenar...! Y, si no tenemos un cierto cuidado, puede pasar que un cuerpo que había estado más de 100 días encerrado se resienta. Que se lesione. Que no pueda soportar el trabajo que meses antes era tan sencillo para él. Aprender a controlar la carga emocional es fundamental para un deportista, y más en circunstancias como las que estamos viviendo. Lo último que queremos es volver a estar encerrados porque la escayola nos lo impida, ¿verdad? Por esta razón, es importante aprender a regular aquello que estamos sintiendo. Planificar la vuelta a los entrenamientos, yendo poco a poco, es ahora más importante que nunca. Por muchas ganas que tengamos, es fundamental tomárselo un poco con calma. Ir con cuidado y disfrutar al máximo de nuestro regreso. 

    Por el otro lado, tenemos los cambios obligatorios que debemos llevar a cabo nos gusten o no. ¿Qué hacemos con la mascarilla? Pues, aunque posiblemente a nadie le guste esta respuesta, me temo que no hay otra: hay que acostumbrarse a ella. (Lo siento si me repito, pero es lo que toca 😅). ¿Y cómo podemos acostumbrarnos a la mascarilla y al resto de cambios, como la distancia social? Veréis: en Psicología hay un efecto al que llamamos habituación. Se trata de un proceso de aprendizaje mediante el cual dejamos de responder ante un estímulo que se repite. Traducción: acostumbrarse a algo hasta que deja de molestarnos. Y la única forma de conseguirlo es eso, con repeticiones. Ahora bien... Nadie dice que tengan que ser físicas.

    La técnica de la visualización es clave muchísimas veces para aprender nuevas conductas. Y ahora no nos va a fallar, por supuesto. Mediante imaginación, podemos intentar vernos a nosotros mismos en las nuevas circunstancias que nos acompañan. Se trata de visualizar nuestro deporte con los cambios que ha sufrido, con el mayor número de detalles posibles. Si se hace bien, llegará un punto en el que nos hayamos habituado sin necesidad de salir de casa. Y, al final, habremos conseguido acostumbrarnos a los nuevos cambios que han aparecido. 

    La parte positiva de todo esto es que, si lo pensáis bien, el entrenamiento psicológico no ha cambiado tanto para estos deportistas. El control emocional y la visualización son dos técnicas que cualquiera debería tener en su repertorio. Convertirlas en parte habitual de nuestro entrenamiento nos será muy útil en muchísimas áreas, y en cualquier circunstancias. Lo único que hay que hacer es, como con todo, adaptarlas para que encajen bien en nuestra "nueva normalidad". 

    No sabemos qué nos deparará el futuro. No sabemos cuánto tiempo va a durar todo esto que seguimos viviendo a día de hoy, ni cómo seguirá evolucionando en los próximos meses. Pero si hay algo que sí tenemos que saber, es que no podemos permitirnos quedarnos parados. Hay que seguir luchando por las cosas que nos importan, y el deporte es una de ellas. 

    En palabras de Kelly Slater, surfista: " La adaptabilidad es la manera en que surfeamos la ola del cambio".